En la comunidad de Castilla La Mancha ha existido durante muchos años una entidad conocida como la Obra social de Caja Castilla La Mancha, la cual tenía como objetivo mejorar las condiciones tanto sociales como medioambientales de la comunidad, evitando así que fuera considerada como una comunidad “inferior” respecto a otras.
Para conseguir este reto que suponía mejorar tantos aspectos tan complejos de una comunidad entera, la Obra social de la Caja de Castilla La Mancha tomó la decisión de destinar alrededor del 30% de los beneficios obtenidos anuales al desarrollo de una actividad diversificada en varias áreas generales como son la social, la cultural, la educativa y la medioambiental.
Educación y sensibilización medioambiental
Cada vez son más las personas que tienen conciencia sobre la importancia de cuidar el medioambiente y mantener en buen estado la naturaleza que nos rodea, intentando disminuir los problemas que puedan perjudicar al medioambiente.
Este es uno de los puntos que la Obra social ha querido tratar desde sus inicios, para ello cada año hacían el concurso de ayudas para otorgar una subvención a los mejores proyectos que tuvieran relación con la conservación y mejora del medioambiente.
Pero no todo acaba aquí, pues tras ver el éxito durante varios años de este concurso, se detectó el gran interés de la sociedad manchega por su entorno, por lo que decidieron realizar unas jornadas en las que todo el mundo que estuviera interesado visitará lugares emblemáticos de la zona como son las Lagunas de Ruidera, el Nacimiento del río Mundo, las Torcas de los Palancares o el valle del Gévalo. El éxito de esta iniciativa no tardó en llegar, pues cerca de 12000 personas mostraron interés en estas excursiones.
Apoyo a la educación
Un punto muy presente en los miembros de esta asociación es sin lugar a dudas la educación de las nuevas generaciones, por lo que tenían claro que debían destinar parte del porcentaje en ayudar a mejorar las condiciones de los colegios.
Para conseguir esta mejora en cuanto a la educación, consiguieron dotar a un gran número de colegios con los medios informáticos necesarios para mejorar el aprendizaje. Esta medida se lanzó para combatir también la exclusión educativa que hay en determinadas zonas que sufren una despoblación muy acusada, evitando así que cualquier niño de Castilla La Mancha se educará en condiciones desiguales respecto al resto de infantes de la comunidad y del resto de España.
Acercamiento a la cultura de Castilla La Mancha
En España hay una gran diferencia en cuanto a oferta cultural dependiendo de la zona en la que estés, no encontrarás los mismos museos en una ciudad como Madrid, Barcelona o incluso Valencia que en ciudades menos visitadas o transitadas como Albacete.
En este caso, la Obra social de la caja Castilla La Mancha tuvo la idea de cambiar esta situación tan desagradable culturalmente hablando, ya que los habitantes de esta comunidad no tenían la opción de poder visitar museos, teatros o incluso conciertos de música clásica sin tener que desplazarse a otra ciudad como es Valencia o Madrid. Para ello, pusieron en marcha un gran despliegue en el cual se crearon museos y zonas en las que fuera posible fomentar el arte mediante exposiciones, además se incentivó en gran medida la creación literaria para nuevos autores así como los más añejos y la creación artística, con el incentivo de poder ser unos de los afortunados que recibiera el premio literario o artístico de ese año. Claros ejemplos de ganadores en estos premios literarios han sido el escritor Jorge Molist con su novela “La reina oculta”, la cual consiguió un total de 80.000 ventas.
Lo cierto es que gracias a la Obra Social de esta caja, se han hecho grandes avances en toda la comunidad, acercando a la población la cultura, la educación, consiguiendo una conciencia social y medioambiental en todos los ciudadanos, demostrando de esta forma que invertir en la sociedad es una apuesta segura de cara al futuro, pues las nuevas generaciones son las que llevarán a cabo las tareas en los próximos años y es importante que crezcan en un entorno que les aporte la cultura y la educación necesaria para formarse adecuadamente
